RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

domingo, 29 de enero de 2012

SÁBADO DE LARGA SESIÓN CON MANDARINA INCLUIDA

Volvíamos el sábado a las largas distancias, para estrenar las NB en estos lances. Proyectado, dos vueltas a un circuito de 13.350 metros la vuelta, es decir, 26.700 metros, con paso obligado por casa para avituallar. Así que madrugué obligadamente debido a que los crios no pueden quedarse solos, ya que mi mujer se va a trabajar temprano. A la primera luz del día comencé a buen ritmo, siendo los primeros kilómetros algo duros por llevar el viento en contra y hacer frio; sin embargo enseguida comprobé como las piernas iban a responder y fui imprimiendo un ritmo bastante por debajo de 5 minutos el kilómetros. Cuando el viento sopló de costado y se hizo cuesta abajo, las buenas sensaciones se multiplicaron y se me instaló la sonrisa en la cara. Luego una cuesta durilla para llegar al pie del Angel, por la carretera, y de nuevo bajando hasta el parque por la vía de servicio de la autovía. En la vuelta al circuito de los alrededores del parque seguían las buenas sensaciones, pero un dolorcillo se me instaló en la zona alta de la ingle derecha, lo cual me hizo ir pensando en viejos fantasmas relacionados con hernias inguinales (estoy operado de la ingle izquierda). Tras dejar el parque atrás y dirigirme a casa de nuevo buenas sensaciones y al pasar por casa, marcaba una hora 2 minutos, lo cual era para estar optimista. Allá en casa, me tomo la bebida isotónica tranquilamente y un plátano y una mandarina, todo previamente pelado; no me importa perder cuatro minutos en el descanso, porque no tengo prisa ni estoy compitiendo. Comienzo la segunda vuelta con la certeza de que va a ser mejor incluso que la primera. Paso lo peor, la primera parte, con mejor brio, bajo muy bien, subo al Ángel muy bien también, llego al parque pensando que no me importaría dar tres vueltas, sin embargo en la vuelticilla al parque tengo una pequeña crisis de sensaciones, pero nada importante; me recupero a la ida a casa y termino superbien haciendo menos de una hora y un minuto en la segunda vuelta. Tiempo total 2 horas y cuatro minutos para 26.700 metros.

Lo mejor es que no me quedan molestias ni acabo muy cansado.

No hay comentarios :

Publicar un comentario