Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.
sábado, 4 de febrero de 2012
MIÉRCOLES 1 FARTLEK Y MÁS FARTLEK
Llegué el martes de nuevo al parque con la intención de hacer cambios de ritmo de unos 500 metros, así que tras el calentamiento pertinente hice 6 cambios más la ida y la vuelta, lo cual supusieron unos 8,5 kilómetros.
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