RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

jueves, 3 de mayo de 2012

JUEVES 3 500 METROS GRABADOS A FUEGO

El jueves no tenía que ir a trabajar hasta las 12:00 por lo que tras llevar a los críos al colegio me fui a la pista de atletismo. Allí calenté durante 20 minutillos. Por cierto había unos atletas marchadores ecuatorianos entrenando y tenían muy buena pinta. Sé que eran de Ecuador porque llevaban puesta la camiseta de su selección. Eran un chico y una chica que estaban haciendo series de marcha a un ritmo demencial. A ver si investigo y descubro quiénes eran.

Por mi parte, me puse a hacer las 15 series de 500 metros que me tocaban, recuperando en cada una al trote en 300 metros. Comencé fuerte, en aproximadamente 1´52´´ y ya en la tercera estaba haciendo 1´47´´. Todas rondaron ese intervalo de tiempo, pero se me hizo tan duro que llegados a la número 12 me puse la sudadera y me fui descalentando a casa. Ahora mismo estoy totalmente desfondado pero me encuentro bien.

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