RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

sábado, 27 de octubre de 2012

UNDÉCIMA SEMANA DEL PLAN ESPECÍFICO PARA LA MARATÓN DE VALENCIA

¡Madre mía!, no me lo puedo creer, he pasado lo peor. A partir de ahora todo debería ser más fácil; eso espero. Quedan sólo tres semanas para el ansiado día D y podríamos decir que ya he puesto toda la carne en el asador y ahora hay que esperar a que se dore para comérmela. La undécima vino marcada por cambio de planes, y es que en el planning original venían acumulados 82 kilómetros, ya que con la misma comenzaba el periodo de tapering. Pero decidí posponer dicho periodo una semana más con el objeto de meter la pata y no alargarlo demasiado, con lo que le añadí kilómetros y calidad hasta los 100 que finalmente he hecho. Comenzó este ciclo semanal con la tirada larga del sábado pasado: 26,4 kilómetros marcados por el barro; y es que me metí por caminos que no conocía y la lluvia caída el día anterior hizo el resto. Aún así no estuvo mal, porque el barro hizo que trabajara la fuerza. Llegué entero y sin mayores problemas aunque tampoco me exigí mucho en los ritmos. El domingo tocó lo de siempre últimamente, largos minutos de suavidad en la carrera; en esta ocasión no fue un entrenamiento tan extenso en el tiempo, y tras 40´de carrera a 6´y pico, hice otra media hora a 5´ y poco para hacer luego unas series de gradas, trabajar los tobillos y descalentar. Este entreno me sentó pero que muy bien y me preparó para el lunes, día en el que tocaba una hora con cuesta a ritmo moderado; salió un entreno fresquito y agradable y bastante suelto. Llegaron las series del martes, en esta ocasión 15 de 500; tras un calentamiento bastante largo me fundí una otras otra cada ellas, recuperando en 300 metros al trote suave; en el descalentamiento comprobé como estaba menos cargado que en otras ocasiones. El miércoles tocaba volver a salir, porque había sido eliminado de la planificación; en esta ocasión consistía en carrera continua sin mucho chiste y sin grandes pretensiones e hice casi 50´de nuevo a ritmo moderado, aproximadamente 5´10´´. El jueves era el día del fartlek, y en esta ocasión con una cadencia distinta, 1 minuto fuerte y un minuto suave. Tras calentar durante 15´hice 39´de cambios de ritmo marcados por las dificultades al comienzo y la subsiguiente adaptación a la carga. El viernes, ayer, tocaba cerrar el círculo haciendo una hora a ritmo moderado, y lo completé sin mayores dificultades. A destacar la lluvia que ha dificultado muchos de los entrenos, o bien mojándome o bien dejando el terreno en malas condiciones; pero también destacar que de nuevo me he librado de problemas, de molestias y de malas sensaciones. Si acaso un poco cansado de mente, quizá porque veo que se acerca ya lo esperado y compruebo todo el trabajo realizado. Ahora a no impacientarse.

Os pego, como cada semana la tabla:

No hay comentarios :

Publicar un comentario