RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

jueves, 10 de diciembre de 2015

LUNES 7: ENTRENO LLENO DE TONOS VERDES EN LINARES

El lunes al mediodía regresábamos de Málaga dirección a Linares. Comíamos en la carretera y nos poníamos hasta arriba: había mucha hambre. Llegamos a Linares con el tiempo justo para cambiarme de ropa e ir a soltar un poco. Me fui por la vía verde de la zona del Camino de Úbeda y resultó que me encontraba genial. El día anterior había hecho una maratón en 4 horas, lo cual no es gran cosa, pero si tenemos en cuenta mi pubalgia y como terminé (lo cual me preocupó), para mi era inesperado encontrarme tan suelto y sin molestia alguna. Tanto es así que decidí meter un poco de caña y bajé los 6 kilómetros de la mencionada vía a buen ritmo. Luego, al regreso, tocó acometer la cuesta de bastante pendiente, pero me encontraba bien y no me resultó muy complicado. Total, que llegué a casa de mis suegros bastante contento de los 10,5 kilómetros sorprendentes por la rápida recuperación muscular. Si todo iba bien quería realizar una buena semana.

No hay comentarios :

Publicar un comentario