RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

jueves, 10 de diciembre de 2015

MARTES 8: DESPEÑAPERROS. MIRANDA DEL REY-CASTILLO CASTROFERRAL-MIRANDA DEL REY

Sin darme descanso alguno, el martes al mediodía, aprovechando que era festivo, cogí el coche y me fui a Despeñaperros para realizar un circuito que conocemos Merche y yo de haberlo hecho en dos ocasiones: Miranda del Rey-Castillo de Castroferral-Miranda del Rey. La idea era hacerlo a un ritmo más vivo que en las dos otras ocasiones (la primera casi que no contó porque fuimos en plan turismo y tardamos 3 horas 50´ y la segunda fuimos más en serio y Mercedes y yo lo hicimos en 2 horas 50 minutos). Así que con la idea de no parar y tratar de no andar me dispuse a realizar los 21,5 kilómetros con seiscientos y pico de desnivel positivo. Es una pena que no haya llovido prácticamente desde que comenzó el otoño, porque esa zona debe ser impresionante en el momento que haya agua, en cualquier caso el hecho de que los arroyos bajen prácticamente sin nuestro líquido preciado me permitió cruzar el más grande sin problemas. A las 12:10 salía sin mochila y quizá con demasiado ropa (mallas, camiseta interior y camiseta de manga corta). Pronto me dí cuenta de que me sobraban la primera y la segunda, pero ya era tarde. 

Pronto sentí que tenía cansadas las piernas y que me iba a costar. Además, llevaba las NB 1210 MT y son bastante más pesadas que las NB 890, pero tocaba montaña. Casi sin darme cuenta me ví subiendo y subiendo hasta que casi reviento (demasiada calor). Después se hizo más llevadero y en el cortafuegos de pendientes vertiginosas mi cintura se portó como una campeona pudiendo forzar. La subida hasta el castillo fue casi un castigo, pero tras coronarlo ya estaba pasado lo peor. Bajé por el cortafuego hasta alcanzar la pista: 1 hora y 9 minutos para 10,3 kilómetros, no estaba nada mal, a 6´42´´ pero habiendo salvado ya casi 500 metros de desnivel positivo. El resto del recorrido discurre por una pista entre árboles con subidas y bajadas, pero bastante más rápido. No me sentía muy entero así que tampoco pude imprimir un ritmo demasiado vivo, pero los kilómetros fueron cayendo hasta llegar a la parte final, que es un pasote de bonita corriendo entre dos gargantes por una zona llena de jaras. Al final 2 horas 15 minutos, la segunda parte me llevó 1 hora y 6 minutos para los 11,4 kilómetros, a 5´47´´ de media.














Esta es la ruta medida en la wikiloc











Y esa es una foto del Castillo de Castroferral


No hay comentarios :

Publicar un comentario