RELATOS

Una vez iniciado el movimiento supe que no habría marcha atrás, sería difícil regresar a aquello que fui. Hoy soy otro ser: curtido, compañero del esfuerzo, amante de mis kilómetros. Sólo el fin de mis días debería obligarme a parar: ese es mi pequeño sueño.

domingo, 30 de julio de 2017

SÁBADO 22: LA DESPEDIDA

El sábado tocó despedirse, fue triste, pero al final se nos ocurrió hacer algo que siempre quedará en nuestro recuerdo: reservamos para comer todos juntos (todos menos él, claro), en el mismo sitio, en el mismo rincón, con el mismo biombo que nos separaba del resto, donde casi un mes antes habíamos celebrado su último cumpleaños. Estas dos fotos son de aquel 24 de junio, del día que cumplió años por última vez.



Durante la comida, charlamos, nos dimos calor y hasta sonreimos, y seguro que hicimos lo que a él le hubiera gustado que hiciéramos, ¡vivir!. La tristeza no tardó mucho en volver a acompañarnos


No hay comentarios :

Publicar un comentario